Dibujar ¡eso se aprende! Poco material, algunas nociones técnicas y mucha práctica te permitirán, no solamente dominar esta disciplina, sino también adquirir una verdadera pericia que supone la base de todas las demás técnicas artísticas.
Dibujar ¡eso se aprende! Poco material, algunas nociones técnicas y mucha práctica te permitirán, no solamente dominar esta disciplina, sino también adquirir una verdadera pericia que supone la base de todas las demás técnicas artísticas.
La manera de sujetar el instrumentos (lápiz, carboncillo u otro) es primordial, pero también muy personal.
Algunos conocimientos
Los dedos, la muñeca, los brazos, todo el cuerpo forma parte del gesto. Cuanto más cerca estén los dedos del papel, más detallado será el dibujo. Al contrario, el croquis y el boceto se realizan sujetando el instrumento un poco más lejos, para poder desarrollar movimientos amplios.
Empieza con temas sencillos, como naturalezas muertas, antes de lanzarte a las composiciones más complejas (paisajes, retratos). Para componer tu tema, déjate guiar por tu intuición. He aquí algunos trucos para ayudarte a empezar:
Regla de los tercios. Divide el soporte, horizontal y verticalmente, en tres filas iguales y luego coloca los elementos importantes del cuadro cerca de estas líneas: una técnica sencilla pero eficaz.
Elección del formato. « Paisaje » (rectángulo horizontal), genera una impresión de espacio; « retrato » (rectángulo vertical), da una impresión de intimidad; « marina » (rectángulo muy alargado), produce una vida panorámica; cuadrado, atrae la mirada hacia el centro del cuadro.
Tu ojo debe hacer un importante trabajo de análisis. Una vez elegido el tema, tendrás que estudiarlo bajo todos los ángulos.
Entrénate a representar de manera esquemática el tema elegido, basándote en las formas y volúmenes geométricos.
¡A cada cual su técnica!
Existen distintos métodos para guiarte en la construcción de tu dibujo. Puedes:
- trazar ejes de simetría
- descomponer el tema en varias formas geométricas
- cuadricular el papel
Bastan un cuaderno y un lápiz.
Como si fuera una cámara de fotos, puedes captar distintas imágenes del tema bajo todos los ángulos.
¿Un tema estático? Realiza tu croquis en función de distintos ángulos, para trabajar los volúmenes y los cambios de luz.
¿Un tema móvil (ser humano, animal)? Aprende a observar los movimientos y actitudes.
Algunos conocimientos: La escala no tiene importancia en esta etapa. Para empezar, es mejor realizar los croquis en formatos pequeños, más fáciles de dominar.
Ya dispones de toda la información necesaria para plasmar el dibujo en el papel. Elige un ángulo de visión, la disposición de la luz, los movimientos, etc. Realiza con trazos ligeros las primeras líneas del dibujo.
Para trabajar los detalles, no dudes en multiplicar los ejercicio de preparación en hojas de borrador. Prueba los distintos matices de gris, difumina, utiliza el plumeado… ¡Lánzate sin reservas a descubrir las distintas técnicas de dibujo!