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El paisaje: crear un ambiente

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La serenidad de la mañana, la irrealidad de un decorado brumoso, la teatralidad de una escena de tormenta... Un paisaje que marca el recuerdo se caracteriza ante todo por un ambiente especial.

 

Algunos conocimientos:

  • Cuando hace sol, la limpidez del cielo contrasta con los colores vivos de los temas. Da prioridad a las iluminaciones intermedias (media mañana o media tarde), define sombras suaves y contrastes ligeros.
  • Reserva la luz del mediodía, fuerte y aplastante, para los temas que la merezcan: fachadas blancas sobre el mar azul, por ejemplo.
  • Para dramatizar una escena, busca las luminosidades extremas (puesta de sol, tempestad) y acentúa al máximo los contrastes, hasta el claroscuro.

1. Dramatización, modo de empleo

  • Atrévete con los tratamientos inesperados; por ejemplo, dibujando en negativo sobre un papel oscuro.
  • Pon los temas en escena: elige un punto de vista en contrapicado, introduce un primer plano muy fuerte.
  • Acentúa los relieves de los centros de interés con grandes empastes, o con una densidad de pigmentos elevada si trabajas con medios secos.
  • Realza los contornos de los temas con una línea oscura, satura y oscurece los colores.
  • Refuerza los contrastes.

2. Trabajar en claroscuro

Cualquiera que sea el número de colores implicados, el contraste nace de la oposición entre los tonos claros y oscuros. Cuanto más radical sea la oposición entre el fondo y el tema, más ganará en relieve éste último y más se impondrá en una composición decididamente teatral.

  • En una escena globalmente oscura, un tema muy iluminado, casi bañado en una luz sobrenatural, atrae la mirada: es la esencia del claroscuro, tal y como lo definió Rembrandt. En la acuarela de Matthias Braun, al lado: la espuma y la parte clara del cielo, tratadas con la técnica de la apertura (se deja el papel a la vista).
  • Puedes buscar el efecto inverso oscureciendo fuertemente los temas para exaltar la riqueza y la luminosidad del fondo. En la obra de Matthias Braun, al lado: la masa nubosa o las olas.
  • Trabaja finamente los matices intermedios, ya que contraste no significa ruptura. En la obra de Matthias Braun: el verde del mar se declina en varias tonalidades. En la primera capa de verde bastante diluida, ha añadido puntas de color menos diluidas.
  • Piensa en atenuar la densidad de los colores y la fuerza de sus oposiciones a medida que te acerques al horizonte.