Pasar al contenido principal

Dibujo: Crear efectos de frotado

Observe este artículo
Average: 3 (7 votos)

Rallador de cocina, suela de zapato, posavasos... estos objetos cotidianos no tienen nada de especial. Pero ten en cuenta que pueden aportar una pizca de originalidad a tus dibujos. Despierta tu creatividad con la técnica del frotado, sencilla como un juego de niños.

 

En general, en un dibujo, los efectos de materia se consiguen gracias al grano más o menos fino del papel.

Para ir más lejos, crea una amplia paleta de texturas frotando la mina del lápiz sobre una hoja de papel en contacto con distintos materiales.

1. Elegir un material

Tu entorno cercano te ofrece una infinidad de posibilidades.: todos los materiales pueden ser aprovechados. Varía los efectos modificando la presión del lápiz sobre la hoja. He aquí algunas sugerencias de materiales para frotar:

-una pared con la superficie granulada, para representar una extensión de arena

-un paño de ganchillo, para un encaje más real imposible

-un trozo de madera en bruto, para sugerir el relieve de un tronco de árbol

-un rallador de cocina, para obtener motivos alveolados

… etc.  Un solo consejo: ¡Deja hablar a tu imaginación!

El pequeño plus

A medida que vas trabajando, elabora una colección de efectos de frotado conservando muestras realizadas en un borrador, sin olvidarte de indicar los materiales utilizados.

2. Realizar frotados

El material:

  • Elige un papel no muy grueso: papel de dibujo (de 60 a 120g/m2), papel de calco.
  • Un lápiz HB.

Coloca la hoja de papel sobre una superficie rugosa que elijas.

Frota con el lápiz la zona del dibujo concernida.

Recurre a esta técnica con moderación: multiplicar los efectos de frotado sobrecarga la composición. Es mejor combinar el frotado con el dibujo a mano alzada.
 

Si utilizas la técnica del frotado para representar el objeto frotado (un paño sobre una mesa), asegúrate de que esté a la escala correcta.