Para poder disponer de un material listo para su uso y conservarlo en buen estado durante mucho tiempo, no debes descuidar su limpieza y cuidado. Práctica, la acuarela es una técnica que ensucia poco: para limpiarla, basta utilizar agua y jabón.
Para poder disponer de un material listo para su uso y conservarlo en buen estado durante mucho tiempo, no debes descuidar su limpieza y cuidado. Práctica, la acuarela es una técnica que ensucia poco: para limpiarla, basta utilizar agua y jabón.
Aunque la acuarela es un medio de expresión menos agresivo para los pinceles que el óleo y la pintura acrílica, es necesario limpiarlos minuciosamente tras cada sesión de trabajo.
Pinceles limpios en 5 etapas:
Si, tras haber alisado el mechón, queda color en los dedos (algunos pigmentos, como la alizarina, resisten al aclarado), significa que el pincel no está limpio. Puedes utilizar un jabón para artista (o un simple jabón…) : moja el pincel, aplica el jabón en el mechón, frótala en el hueco de la mano generando espuma de manera que el jabón penetre bien hasta la raíz en la base de la virola y aclara con agua corriente.
À retenir : évitez de faire sécher vos pinceaux à la verticale, car l’eau va s’infiltrer à l’intérieur de la virole. Conséquence : l’humidité fait gonfler le bois du manche et écarte les poils. Le pinceau perd de son maintien et de la finesse de son trait !
Evita que los pinceles se sequen en posición vertical, ya que el agua se infiltra dentro de la virola. Consecuencia: la humedad hace que se hinche la madera del mango y separa los pelos. El pincel pierde sujeción y precisión en el trazo.
En pastillas o en tubos, las pinturas de acuarela se conservan durante mucho tiempo y requieren muy pocos cuidados.
Recuerda: ¿aparecen manchas de moho en las pastillas? ¡No pasa nada! Basta limpiarlas con agua utilizando papel absorbente o una esquina de un paño.
Justo después de la sesión de trabajo, aclara la paleta con agua limpia: cuanto menos tiempo tenga la pintura para secarse, más fácil será limpiarla