El origen del quilling
En otro tiempo se utilizaba el eje central de las plumas de los pájaros (a saber, el raquis) para enrollar las tiras de papel. El nombre quilling proviene de la palabra quill, que en inglés significa pluma.
El origen de este arte, conocido también como «filigrana en papel», se remonta al siglo II en China, cuando se inventó el papel y el origami.
A partir del siglo XV y a principios del Renacimiento, los religiosos franceses e italianos comenzaron a utilizar el papel para imitar las filigranas de oro y plata de los orfebres. Los motivos que se hacían con esta técnica se juntaban para decorar las reliquias de santos. Después se colocaban en un cuadro con cristal. Las damas de la alta sociedad se apropiaron de este arte, que hacía mucho que se enseñaba en los colegios, como forma de ocio.
Más adelante, los colonos lo exportaron a América, donde poco a poco fue desapareciendo.
No es hasta el siglo XX, en Estados Unidos, y gracias sobre todo a la mecanización del papel, que la filigrana reaparece.Entonces, las técnicas ya habían evolucionado mucho. La pluma que permitía enrollar las pequeñas tiras de papel había dejado paso a herramientas más prácticas, mientras que el descubrimiento del cartón permitió hacer realidad nuevas formas en volumen.