¡Una tarjeta de papel hecha con el retrato de los niños! Una creación sencilla que cada niño puede personalizar con su propia silueta, colores y su mensaje que escribirá en el reverso.
¡Una tarjeta original ideal para regalar y muy fácil de crear!
Material:
Dibujar el perfil del entorno que te rodea era muy común en el siglo XVIII.
Incluso se inventó una máquina para este propósito. De hecho, era más bien un dispositivo:
el modelo se coloca cerca de una pantalla y por otro lado, una vela proyecta su sombra. Así, el diseñador puede dibujar el contorno de la sombra en la pantalla y obtener una silueta fiel de su modelo.
Imprima el retrato de cada niño (aproximadamente 6 x 9 cm). La foto se debe tomar de perfil y sobre un fondo claro para que destaque el contorno del rostro.
Directamente sobre la foto, dibuje el contorno del retrato con un rotulador negro y coloree todo el perfil en negro.
Dibuje un círculo alrededor del perfil de unos diez centímetros y recórtelo.
En el papel de color, recorte un círculo ligeramente más grande que el del perfil, unos 12 cm y péguelo el perfil en el centro.
Para decorar el contorno de la tarjeta, recorte rectángulos pequeños (aproximadamente 1,5 x 3,5 cm) en el papel kraft. Para ahorrar tiempo, recorte varias capas de papel a la vez.
Pegue los rectángulos kraft en la parte posterior del círculo.
Para terminar la tarjeta, recorte un círculo en el papel blanco (unos 11 cm) y péguelo en el reverso, que cubrirá la base de los flecos y le permitirá escribir un mensaje.
