1. Elección del tema y composición
Empieza con temas sencillos, como naturalezas muertas, antes de lanzarte a las composiciones más complejas (paisajes, retratos o pintura abstracta). Para componer tu tema, déjate guiar por tu intuición. He aquí algunos trucos para ayudarte a empezar:
- Regla de los tercios. Divide el soporte, horizontal y verticalmente, en tres filas iguales y luego coloca los elementos importantes del cuadro cerca de estas líneas: una técnica sencilla pero eficaz.
- Elección del formato. « Paisaje » (rectángulo horizontal), genera una impresión de espacio; « retrato » (rectángulo vertical), da una impresión de intimidad; « marina » (rectángulo muy alargado), produce una vida panorámica; cuadrado, atrae la mirada hacia el centro del cuadro.