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Acrílica : Realizar empastes

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Gracias a los empastes y a sus efectos de textura, tus obras ganarán originalidad. Además, son muy fáciles de realizar…

Algunos conocimientos

Los empastes son pinceladas suficientemente gruesas para que conserven la marca del instrumento (pincel o cuchillo de pintura) que los ha aplicado.

  • Ventaja: la pintura acrílica puede espesarse mucho utilizando un medio (Pasta de modelar o gel de textura).
  • Inconveniente: dado que la pintura acrílica se seca enseguida, tendrás que trabajar con rapidez.

1. Hacer un empaste

Puedes trabajar en toda la superficie del cuadro o reservar los empastes para ciertas partes de la composición, poniéndolas de relieve.

 

  • Utiliza pintura acrílica no diluida al salir del tubo.
  • Aplícala directamente en el soporte.
  • Con un pincel, modela la pintura para darle la forma deseada. Intenta no hacer demasiados retoques: la pintura se aplasta, y los relieves del empaste desaparecen.

Para espesar más la pintura, mezcla el color con un medio en gel (50% de pintura, 50% de medio).

2. Crear texturas originales

Para realizar texturas originales, necesitarás un medio llamado "pasta de modelar", un cuchillo de pintura y distintos instrumentos (tenedor, peine, paño, moneda) que puede dejar trazos en la pintura. ¡Deja hablar a tu imaginación!

 

  • Mezcla una dosis de pintura acrílica con pasta de modelar.
  • Aplica la mezcla sobre el soporte con un cuchillo y luego alisa la capa.
  • Utiliza las púas de un peine para trazar líneas rectas u onduladas, en relieve, en la capa de pintura. También puedes utilizar un tenedor para producir crestas y surcos, o una moneda para dejar una huella muy redonda.